" El Juzgado de lo Penal número 4 de Bilbao ha condenado al alcalde de Errigoiti, Iñaki Madariaga, a un año de cárcel y 548 euros de multa por atropellar a un vecino tras enzarzarse en una discusión con un grupo de personas que protestaba contra la construcción de una planta de biomasa, un polémico proyecto que tiene un importante rechazo social. La víctima, Félix Sorhouet, de 67 años, que sufrió una embestida «leve», tendrá que afrontar una sanción de 150 euros por golpear dos veces el vehículo del regidor con un palo antes de que éste abandonara el lugar «de forma acelerada» tras protagonizar el suceso.
Los hechos se remontan al 14 de marzo de 2010, al paso de la marcha cicloturista Bilbao-Bilbao por Errigoiti. Los manifestantes protestaban tras una pancarta en la que se leía 'Meta humeante' y unas cajas de cartón que simulaban una chimenea cuando apareció el alcalde conduciendo un turismo y advirtiendo que la iniciativa no estaba autorizada. El rifirrafe fue ganando en intensidad y acabó con la presentación de denuncias cruzadas entre los implicados por atropello y amenazas de muerte. El agredido tuvo que acudir al hospital con un golpe en la rodilla derecha que, a pesar de que no le impidió «ejercer sus funciones», tardó 15 días en sanar.
Tras la apertura de juicio oral, el fallo, notificado el martes a las partes, considera a Madariaga culpable de un delito de lesiones. «Debe concluirse la existencia de un 'animus laedendi' -voluntad de dañar- en el acusado sin que quepa afirmar que actuó a título de mera imprudencia», señala el auto. Antes de que el alcalde de Errigoiti dejara el lugar con su vehículo «pudo ver a aquel situado en la parte delantera de su coche y, aún así, le golpeó», añade el escrito. Lo hizo sin que la justicia pueda dictaminar «con la mínima rigurosidad un mal amenazante real, inminente y grave por parte de los manifestantes.
No obstante, dado que las heridas causadas no revistieron excesiva gravedad, Madariaga ha quedado exculpado de un delito de conducción temeraria, un segundo año de cárcel y una pena accesoria de suspensión de empleo y sueldo, peticiones de la Fiscalía y la defensa del agredido en el inicio de las diligencias. Eso sí, el alcalde de Errigoiti, que el mes que viene tendrá que volver a los juzgados para enfrentarse a la acusación de realizar empadronamientos «ilegales», tendrá que indemnizar económicamente por los daños causados y ha sido inhabilitado un año para el ejercicio del sufragio pasivo -ser elegido para cargo público-. Si las elecciones locales se celebraran durante los próximos meses no podría presentarse pero, una vez alcanzado el puesto, la pena no tendrá repercusiones reales".
(*) Ver noticia publicada en EL CORREO Ed. Bizkaia pg.5 del 26 abril 2012
Juzgado nº 4 de Bilbao sentencia nº96/2012
Para ampliar información:
6º) http://www.poligonomalluki.blogspot.com.es/2012/04/el-correo-14-de-abril-2012-la.html
(*) Que opina la diputación
sobre el proyecto de instalación de una
central de biomasa en Errigoiti.